domingo, 28 de diciembre de 2008

1M 2009: ¿qué pasará?


Llegó la hora de la verdad para el Parlamento Gallego, el pistoletazo de salida ya se ha dado y las elecciones están convocadas para el mes de marzo del año que estamos a punto de comenzar. Un año complicado desde el punto de vista electoral, con tres citas que aunque distintas, con una importancia remarcable para los principales partidos de ámbito nacional: por un lado, en las elecciones gallegas, el PP espera iniciar el camino hacia el gobierno de la nación (española...) en el mismo bastión en el que un día fueron infranqueables durante la era "Fraga". Para ello cuentan con un nuevo candidato que se enfrenta por primera vez a unas elecciones como cabeza de lista. Por otro, las elecciones vascas, con una significación especial a nivel estatal, pues podría ser la primera vez en la democracia española que un partido "no nacionalista" encabece el gobierno vasco. Y por último, las elecciones europeas, que aunque con menos peso específico servirán de reválida a Mariano para ver si con el carro de la crisis es capaz de dejar atrás su reciente derrota (que por mucho que se quiera disfrazar, lo fue de él y de su equipo, aunque de todos ellos sólo quede él...). Todo esto ocurrirá en un plazo de unos meses y permitirá tener una buena idea del coste que la crisis ha tenido en especial en los votantes del PSOE.
En lo que se refiere a las elecciones gallegas, éstas llegan en un momento en el que la situación económica actual no parece que vaya a favorecer al actual presidente. Las estrategias de los dos principales partidos parecen haber tenido en cuenta este particular, por lo que la presencia de Zapatero en la campaña estará en un segundo nivel mientras que el PP ha optado por la participación reforzada de Rajoy en la misma. La duda está en si la factura al PSOE se convertirá en votos que se vayan hacia el PP o ,por el contrario, éstos se queden en la órbita nacionalista lo que permitiría mantener la actual fórmula de gobierno bipartito con una distribución de poderes más o menos corregida. La verdad es que a pesar de los problemas surgidos entre ambas formaciones tanto Touriño como Quintana han sabido mantener el acuerdo en contra toda previsión. Pero esto se ha conseguido, en opinión de muchos, a costa de que el PSdG haya cedido en temas importantes en los que muchos de sus votantes esperaban otra cosa. Esto podría finalmente penalizar a los socialistas, sobre todo a causa de aquellos que opinan que el giro nacionalista que se le está dando a la Xunta empieza en algunos temas a ser excesivo.
Lo que si parece claro es que el resultado será apretado, y la gobernabilidad de Galicia podría estar nuevamente en manos de un puñado de votos bien de la diáspora (donde parece que el PSOE ha hecho sus deberes) o de la provincia de Pontevedra, en dónde el resultado parece más abierto. Podría darse incluso una situación en la que un diputado de una agrupación como UPyD recién llegadas al panorama político, acabase decidiendo quién y cómo se van a hacer las cosas en los próximos cuatro años.

Sea como fuere, y a título de curiosidad, en la gráfica se puede ver cómo se han comportado los votantes de nuestra capital en los comicios realizados en los últimos ocho años. Cada uno que saque sus conclusiones y que haga sus quinielas...